«… Nos enfrentamos a graves inundaciones, familias enteras tuvieron que ser rescatadas de los tejados de sus casas, desesperadas por salvarse».

Entrevista con Reynaldo Ortiz
Director Ejecutivo de Rescate Ambar
7 de octubre de 2017
Después de la tormenta siempre llega la calma y aprovechando la calma tras su respuesta al huracán Irma y al huracán María aprovechamos para hablar con Reynaldo Ortiz, Director Ejecutivo de Fundación Rescate Ambar, situado en la ciudad de Puerto Plata, en la costa norte de la República Dominicana. Puerto Plata fue golpeado por ambos huracanes el pasado mes de septiembre y Rescate Ambar estuvo presente en ambas ocasiones para movilizar a sus voluntarios y recursos y tender una mano a la gente de Puerto Plata en sus momentos de mayor necesidad. Nos sentamos con Reynaldo para hacerle varias preguntas sobre las experiencias y los esfuerzos de Rescate Ambar durante, antes y después de estas históricas tormentas.
Traducido por la Dra. Dianne Dorville Tavarez
¿Cuál es la misión de Rescate Ambar?
Somos una organización de ayuda sin ánimo de lucro cuya misión es proteger y salvar las vidas de nuestros conciudadanos prestando servicios de atención prehospitalaria, así como organizando la formación de los estudiantes, realizando actividades de divulgación en la comunidad y participando en los planes de preparación, respuesta y mitigación de catástrofes de la comunidad.
En su larga carrera como socorristas, ¿cuántas catástrofes naturales ha vivido que recuerde?
He sido testigo y he participado en la prestación de asistencia en diversos desastres y/o catástrofes en nuestro país y específicamente en Puerto Plata, y también en el vecino país de Haití. Mis colegas y yo pudimos prestar servicio durante la respuesta al huracán George (1998) y Olga (2007), durante la terremoto en 2003 que tuvo un gran impacto en Puerto Plata, y también tuvimos la oportunidad de ayudar en nuestro país vecino, Haití, tras el terremoto de 2010, realizando arduas labores de rescate.


¿Cuál fue su experiencia durante la respuesta al huracán Irma y María?
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¿Cómo se prepara Rescate Ambar ante la llegada de un huracán?
Para estar siempre preparados, nuestra agencia lleva a cabo sesiones de formación varias veces al año, pero cuando la temporada de huracanes comienza el 1 de junio hasta el 30 de noviembre, revisamos los conocimientos y la formación del personal, actualizando los conocimientos sobre el seguimiento de un huracán utilizando mapas y otras herramientas, revisamos los recursos para verificar lo que tenemos y lo que nos falta (botas palas, picos, equipo impermeable, botiquines), y también llamamos a nuestros socios de ayuda mutua en la comunidad con vehículos 4×4 que nos pueden prestar en caso de que se necesiten – para recordarles que la temporada de huracanes está encima para que estén listos para nuestra llamada en caso de que se necesiten los vehículos.
Cuando hay una amenaza inminente de huracán, reunimos y ponemos en escena a todo el personal en nuestra estación por si es necesaria una evacuación en las zonas de alto riesgo. Una vez confirmado el huracán, todos esperamos en los cuarteles a que pasen las horas de mayor peligro y entonces procedemos a rescatar a los que han sufrido daños.
Los voluntarios también trabajan en las sesiones de educación pública antes de la llegada del huracán.
Trabajamos duro, primero en llegar a la población en general con otras agencias de rescate aquí en Puerto Plata. A continuación, nos centramos en organizar refugios en los que se pudiera llevar a las personas evacuadas de los lugares más vulnerables; en estos refugios se montó una ambulancia RA con personal médico y asistentes para poder responder rápidamente y trasladar a los hospitales locales cuando fuera necesario. Tras el huracán, nos implicamos en las labores de mitigación, ayudando a despejar las carreteras bloqueadas por los árboles caídos y tirados en el suelo. En coordinación con el gobernador de la provincia de Puerto Plata, seguimos trabajando duro durante varios días, luchando por no dejarnos vencer por el cansancio. De este modo, la AR tuvo una participación activa durante ambas tormentas, protegiendo primero la vida de los residentes y luego las labores de mitigación.
Durante la respuesta al huracán Irma y María, ¿qué tipo de incidentes fueron los más comunes? ¿Hubo alguna que recuerde con claridad y que pueda compartir con nosotros?
En el caso del huracán Irma, la mayoría de las carreteras de Puerto Plata estaban bloqueadas por árboles derribados por los fuertes vientos y nuestro personal tuvo que emplearse a fondo para retirarlos. Otros incidentes que recuerdo fueron que varias mujeres embarazadas alojadas en los albergues se pusieron de parto debido a la presión y el susto del momento; nuestras ambulancias y personal tuvieron que llevarlas al hospital o a las diferentes clínicas de la ciudad, algunos de estos incidentes ocurrieron en los momentos de mayor riesgo mientras el huracán golpeaba, poniendo en riesgo a nuestro personal. También recuerdo un momento en el que una de nuestras ambulancias quedó atrapada en un puente a la entrada de la ciudad durante el paso del huracán Irma, cuando se trasladaba desde el refugio situado en la universidad local hasta el hospital con una mujer embarazada, un poste del tendido eléctrico cayó en la parte delantera de la ambulancia y cuando el conductor intentó volver atrás quedó atrapado por otros tendidos telefónicos que también cayeron, lo que nos obligó a enviar otra unidad de nuestra estación para rescatar al personal de la ambulancia y poder llevar a la paciente al hospital.
Durante el paso del huracán María nuestros voluntarios trabajaron mucho en la comunidad de Sabaneta de Yasica, situada más allá de Cabarete. Gracias a Dios, una empresa privada nos prestó uno de los camiones militares que se utilizan aquí para transportar a los turistas por carreteras difíciles y lo utilizamos para entrar en esa comunidad; nos encontramos con graves inundaciones, hubo que rescatar a familias enteras de los tejados de sus casas, desesperadas por salvarse.
En el momento más álgido del huracán, hubo algunos accidentes que tuvimos que atender y también recibimos llamadas de personas a las que el huracán les arrancó el techo y tuvimos que llevarlas a los refugios en pleno huracán Irma.
¿Qué ha podido aprender de su respuesta al huracán Irma y María que le sirva mejor para el próximo?
La primera lección fue la importancia de seguir constantemente la trayectoria de las tormentas en Internet. Anteriormente, sólo escuchábamos la información proporcionada por las autoridades del país [on TV or the radio], que, al no disponer de los equipos necesarios para el seguimiento de un huracán, transmitían la información con retraso. Pero gracias a Internet, ahora podemos estar al día con la última información del centro de huracanes de Miami y de otros organismos internacionales que nos permiten recibir información actualizada a cada momento, manteniéndonos informados al 100% sobre la verdadera trayectoria del fenómeno natural y permitiéndonos estar preparados para actuar a tiempo.
¿Cómo podría la comunidad estar mejor preparada contra la posible amenaza de otro huracán?
El primer paso es mantener un contacto permanente con los organismos de socorro, escuchando la información que transmiten la radio, la televisión y otros medios de comunicación. Otro paso importante es la creación de campañas de concienciación de la población a través de diferentes medios de comunicación, tanto audiovisuales como impresos, en las que se especifiquen los pasos a seguir antes de que el huracán toque tierra y se tenga una mayor conciencia de los riesgos para la vida; estas campañas no se realizan por la falta de recursos.
También es muy útil la creación de grupos comunitarios encargados de velar por el bienestar de su comunidad, que se convierten en la primera línea de respuesta de la comunidad ante cualquier petición de ayuda.

¿Cree que hay ideas equivocadas en las comunidades ante un huracán?
Sí, por supuesto, hay varios. Una de ellas es que la gente cree que si el huracán no pasa directamente por encima de su comunidad, no les afectará, un concepto totalmente erróneo, ya que aunque la tormenta pase a cientos de kilómetros de distancia puede causar daños en la comunidad.
Otra creencia errónea que se suele encontrar es que cuando las casas son frágiles, o están construidas de madera, creen que abriendo dos puertas paralelas en la dirección del viento, éste entrará por una y saldrá por la otra sin causar daños, lo cual es un grave error, ya que una vez que el viento entre con fuerza en la propiedad, levantará el techo de la casa.

¿Cómo han ayudado los voluntarios de Rescate Ambar a la ciudad de Puerto Plata?
Antes de que Rescate Ambar comenzara a prestar servicios en Puerto Plata, muchas personas morían después de sufrir un accidente o cuando tenían algún problema de salud en su casa, porque no había ninguna agencia en la ciudad que proporcionara atención y transporte a las personas. Desde que empezamos en 2003 hemos prestado un servicio muy importante para la comunidad: siempre hemos tenido ambulancias y siempre que hay una emergencia salimos a ayudar. Antes, los familiares tenían que transportar a sus pacientes en furgonetas, coches e incluso en motocicletas -incluso después de un accidente de coche el paciente era transportado en moto-. En el caso de nuestra respuesta al huracán Irma y María, nos coordinamos con otros organismos militares y civiles para trabajar en beneficio de toda la comunidad de Puerto Plata.
¿Cuáles son sus retos como institución?
Como agencia tenemos varios retos, pero el más importante es poder llegar a otras comunidades, poder poner en marcha delegaciones de Rescate Ambar en múltiples municipios de toda la provincia de Puerto Plata, ya que siguen muriendo personas por falta de asistencia en municipios que están fuera del centro de la ciudad y donde no podemos asistir por razones de distancia. Cuando llegamos a estos lugares lejanos, el paciente suele estar muerto. Por ello, tenemos como principal reto la colocación de delegaciones de nuestro personal en varios municipios.
Nuestro segundo reto es la adquisición de vehículos que nos permitan llegar a lugares de difícil acceso en caso de inundaciones o malas carreteras, como un camión militar. Estos vehículos nos permiten cruzar ríos y montañas si no hay helicópteros disponibles para llevar alimentos a las comunidades que están totalmente incomunicadas, una situación habitual tras muchas catástrofes naturales.
Otro reto importante es nuestra capacidad para adquirir nuevas ambulancias. Los que ya tenemos han dado más del 100% de su rendimiento y son muy viejos, por lo que necesitamos un vehículo para nuestra brigada de rescate donde tengamos todas las herramientas de rescate y el equipo de extricación en caso de atrapamiento tras una colisión de vehículos.
¿Qué necesita Rescate Ambar para mejorar su capacidad como agencia?
Nuestra principal necesidad son los recursos, que pueden ser tanto económicos como logísticos, como Beacon, un sistema de comunicación que agradecemos a Trek Medics que nos haya proporcionado. Beacon ha mejorado mucho nuestra forma de comunicarnos y, por lo tanto, también el trabajo que hacemos. Necesitamos recursos para poder pagar al personal porque la demanda de nuestros servicios por parte de la población es tan necesaria que los voluntarios que tenemos no son suficientes.


¿Cómo se utiliza el sistema Beacon?
Desde principios de 2017 utilizamos la plataforma Beaconque ha sido muy útil, porque cuando se producen las emergencias, los voluntarios pueden estar en el trabajo o en casa y se les envía una alerta por mensaje de texto a través de Beacon que les llega inmediatamente, y al enterarse del incidente los voluntarios pueden responder a nuestra base inmediatamente o pueden ir directamente al lugar del incidente. Esto nos permite tener una comunicación más directa, ya que con las radios se puede quedar sin batería o la señal es mala, pero a través de Beacon la respuesta es más rápida y efectiva, por lo que Beacon ha venido a solucionar un problema de comunicación contactando con nuestros voluntarios.
¿Qué tipo de apoyo recibe RA de otros grupos de rescate?
En realidad, muy poco, ya que la mayoría de los organismos de rescate estatales de nuestro país tienen menos equipamiento que nosotros. Pero hemos recibido ayuda de una asociación de expatriados de Puerto Plata que viven en Nueva York. También recibimos ayuda de Bomberos sin Fronteras, una fundación canadiense.

¿Cómo se puede ayudar a la AR?
Tenemos diferentes necesidades, como equipos y materiales de primeros auxilios, ambulancias, radios y dinero para cubrir los gastos de funcionamiento. Si alguna persona u organización quiere ser voluntario con nosotros puede contactarnos a través de Facebook, llamándonos al 1-809-261-4361 o visitando nuestras instalaciones en la ciudad de Puerto Plata, donde podrá acompañar nuestro servicio. Operamos los 365 días del año, las 24 horas del día y nuestras puertas están siempre abiertas. Otro canal para las donaciones son las agencias de transporte, si tienes una donación puedes enviarla libre de impuestos por cualquier agencia de transporte en nombre de nuestra institución a nuestra dirección.
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